MIENTEN DE MANERA INFAME AQUELLOS QUE AFIRMAN QUE CALDERÓN ES UN PELELE

¡Sí, señor!
¡Mienten!
¡Difaman!
¡Calumnian!
En pocas palabras: ¡PECAN!
Si nos atenemos a la lógica de un breve análisis veremos el por qué de lo anterior.
Pelele ¿de quién?
¿De Carlos Salinas?
Esa es mera política ficción. El señor Salinas ya no tiene nada que ver con la vida política del pais y es un hombre respetuoso de los tiempos y las formas. Nunca accedería a manejar a un pelele, sobre todo, después del frentazo que se llevó con el ex bolero del Poli.
¿De Elba Ester Gordillo?
¡Nomás eso faltaba!
Se necesita muy poca madre para acusar a un cadáver ambulante --que con trabajos no se cae a pedazos--, de ser el titiritero de nadie.
¿De Carlos Slim?
¡Por Dios!
¿De cuándo acá el poder político va ligado al económico?
¿De Washington?
¡Carajo!
Hay que saber un poco de geografía, señores difamantes. Washington está muy lejos, ¿cómo podría influír en el señor Presidente? ¿Económicamente? No, ya estamos blindados. ¿Militarmente? No se arriesgarían a perder una guerra contra nosotros. Ya están muy choteados y desgastados como para enfrentar el riesgo de tal ridículo.
¿De Tony Garza?
¿A quién puede manejar un tipo con nombre de cantante de grupo tropical de octava quien, además, siempre apesta a cerveza?
¿Los banqueros?
No pueden. Son extranjeros y lo prohibe la ley.
¿Las transnacionales?
¿No lo dice su nombre?
No son nacionales, señores. No pueden influir en la política nacional, solamente en la trasnacional, lo cual es muy difícil de explicarle al vulgo común y corriente.
Y así, podríamos dar infinidad de razones pero claro, los tercos seguirán insistiendo en su afán por tratar de debilitar a un gobierno fuerte, honesto y con rumbo fijo y bien definido.