PARA PERRO, PERRO Y MEDIO

Resulta interesante que los banqueros suizos --los peores parásitos que haya parido la historia--estén dispuestos a devolver el dinero que LEGALMENTE pertenece a Raul Salinas de Gortari, ya que él fue quien se esforzó por conseguirlo y el que purgó una larga condena por esa lana.
Más interesante aún es el hecho de que el juez que ha decidido que esos billetes deben volver a México se apellida Perraudin, lo cual en francés de pronuncia "perrodán".
Perro tenía que ser, pero nada como el perro callejero que se hace llamar Santiago Vasconcelos, quien --entre que son peras o manzanas-- ya se aperró la lana de marras --en este caso, marras es don Raúl, desde luego--.
Así que, una vez más, los dichos se contraponen: "para perro, perro y medio" y aquél que reza que "perro no come perro".