TIEMPOS DE DESECHAR LO INSERVIBLE

Es un alivio saber que la economía mexicana se encuentra BLINDADA ante la irremediable recesión que padecen Estados Unidos y el resto del mundo.
Sin embargo, me gustaría analizar un par de ejemplos de cómo las cosas se van acomodando en tiempos de crisis.
En Estados Unidos, durante el primer trimestre de 2008, ha bajado la venta de automóviles en un 8% (ocho por ciento) en promedio general. La baja en las ventas se debe principalmente al aumento en los precios del petróleo. De esta manera, los automóviles menos competitivos, los que más consumen, han salido del mercado por la puerta grande.
Si bien el promedio es general, existen algunos rubros, como las camionetas y camiones, principalmente de Chrysler, los cuales han tenido una baja de hasta el 23% (veintitrés por ciento), debido a su bajo rendimiento. En otras palabras YA NO SIRVEN. De esta manera, la crisis coloa las cosas en su sitio y estos vehículos se van a donde deben: a la mierda.
En otro ejemplo, debido a la crisis alimentaria que está aquí y en todas partes desde hace meses y empeora día a día --tal vez porque en esto no estábamos debidamente blindados--, algunos gobiernos se han dado cuenta que se necesita ELIMINAR AL INTERMEDIARIO si el objetivo es no llegar a PADECER demasiada HAMBRE.
Los precios de algunos granos, por ejemplo, se han triplicado en el mercado mundial durante los últimos meses. Los gobiernos responsables han tomado cartas en el asunto y se han convertido en el único intermediario entre la producción y adquisición de granos básicos y su distribución al pueblo.
En este caso, como en el de las camionetas y camiones que nada más consumen y no sirven para nada, la crisis ha eviado a los intermediarios de esos países al carajo.
En México tenemos una cantidad insoportable de diputados y senadores que --en lo general--, en verdad, no sirven para nada. ¿Cuánto nos cuéstan? Nada más consumen y solamente estorban al desarrollo sano de la Democracia.
En cuanto a los gobiernos federal y la mayoría de los estatales, cargan con una maquinaria burocrática obsoleta e inservible, IMPOSIBLE DE PAGAR, ni con TODO EL PETRÓLEO del mundo.
¿Cuántas escuelas? ¿Cuántos hospitales? ¿Cuántas viviendas de interés social podríamos pagar si los mandáramos a donde pertenecen: ¡a la mierda!?
Por lo menos, ahorraríamos en algo de lo mucho, de lo muchísimo inservible que además de padecer, NOS CUESTA A TODOS.
Estamos en época de VACAS MUY FLACAS, no tenemos manera de desperdiciar lo poco que hay manteniendo BURROS.